EL CONSUMIDOR DE NUEVA GENERACION
El crossumer se enfrenta a la publicidad de forma calmada, desconfiada y reflexiva, reivindicando su rol activo y participando en la toma de decisiones hasta el punto de boicotear una empresa u organización si no la considera de su agrado, es comprometido.
Se trata de un consumidor que guiado por la intuición y a su vez, conocedor, en muchas ocasiones, de las artimañas de la publicidad trata de desenmascarar los mensajes con el fin de conseguir la mayor eficacia, es estratega.
Sus experiencias y valoraciones modifican o confirman la percepción original de la marca frente a otros consumidores, es decisivo.
Contrasta los mensajes que recibe recurriendo e investigando distintas fuentes de información para validar o descartar, es decir, para concluir si el mensaje es transmisor de información o persuasivo, es crítico.
Es conocedor y no duda en utilizar, cuando es necesario, las armas legales a su alcance para defenderse ante cualquier anomalía descubierta, a su vez, no duda en cuestionar la marca y las características de los productos.
Es innovador, no cesa en la búsqueda de productos nuevos y utiliza la tecnología para alcanzar sus objetivos, es un geek cuyo objetivo es conseguir mayores características cualificables al mejor precio de mercado.
El crossumer demuestra avidez de información y de opinión, comparte sus puntos de vista e interactua con los demás y con el proveedor, es introvertido y siente una gran curiosidad por el entorno, en concreto, por el producto o marca que va a adquirir.
Por este motivo, las marcas han cambiado sus estrategias publicitarias desde la percepción de la transformación del cliente/usuario en la última década, es evidente que el consumidor no se limita a consumir, es capaz de aportar valores y propuestas en las que otros usuarios/consumidores, a su vez, tengan la posibilidad de formar parte. Para adaptarse a los nuevos criterios del crossumer, fansumer o prosumer lo implican y le hacen participe de su proyecto publicitario.
Expongo unos ejemplos concretos en los cuales las marcas se han implicado y han experimentado con su marca los novedosos conceptos de marketing publicitario:
Vodafone (Abril 2010): Un músico llamado Eddy Jota abandona su banda de rock y el grupo busca un nuevo líder, se trata de pura ficción publicitaria. Sin embargo, traslada la idea a la realidad al organizar una banda llamada Hammer Sound y promocionar la búsqueda de estrellas del rock, en el que el ganador disfrutó de la grabación de un disco, un videoclip y la celebración de un concierto. Detrás de esta iniciativa, se promocionaba la campaña “regalamos el fijo para siempre»
El guardameta Julien Lopetegui sufrió un desmayo en la celebración del mundial de fútbol en Alemania, el incidente fue visto por miles de usuarios en You Tube. A propósito, el Banco Gallego bajo el título ¿por qué se desmayo Lopetegui?, introduce en el momento antes del desmayo un prompter con las condiciones de su promocional depósito bancario, simulando al verlo, fuese este el motivo de la caída, llevado por la emoción.
Otros ejemplos donde la emoción y la experiencia de marca se implican para obtener beneficio:
El concepto de Entertainment marketing aparece como una potente herramienta para seducir al consumidor con el fin de lograr su implicación.
En versión española encontramos el Brandy Soberano, con el título El rey Canalla o La Reina del Bar Canalla. Ono bajo Luna Llena o Los Profesionales de la cerveza Mahou.
Si nos centramos en modelos de rabiosa actualidad encontramos con el spot publicitario Anuncio de la loteria de Navidad 2014, que ha alcanzado 55.000 recomendaciones en Facebook y 1.980 retuits en la red social Twitter, en un corto espacio de tiempo.
Todos ellos comparten un denominador común; el modelo de Marketing comprometido, en el que se busca que la experiencia no finalice con la venta del producto sino que perdure en el sentimiento del crossumer y conocer de «primera mano» las sensaciones perdurables tras la experiencia con la marca .
Como consecuencia, surge la necesidad de generar vínculos emocionales para comprender a un usuario más comprometido, totalmente involucrado y que no guarda similitud alguna con el usuario tradicional de hace una década.